En esta entrada vamos a tratar la necesidad de sacar el flash compacto de nuestra cámara. Esto es, utilizar nuestro flash de mano fuera de la zapata integrada en la parte superior de nuestra cámara.
Esta técnica es especialmente útil para retratos y eventos en los que las sombras pueden echarnos a perder la sesión o el trabajo.
Vamos a conocer un poco más sobre todo esto.
¿NECESIDADES?
¿Cuando necesitamos sacar el flash de nuestra cámara? En muchas ocasiones, se nos plantea la posibilidad de modificar la posición del flash por diferentes motivos: la iluminación de la sala, evitar sombras molestas o iluminar correcta y uniformemente al sujeto a fotografiar.
En el primer caso, tal vez por la iluminación de la sala nos sea necesario modificar la posición de nuestra fuente de luz para compensar. En el segundo caso, se nos plantea la posibilidad de evitar sombras que al tener nuestro flash en la zapata de la cámara y disparar en vertical, nos puede producir el sujeto en el fondo.
Y por último, en el tercer caso, al tener el parasol puesto (obligatorio siempre), y el flash en la zapata de la cámara, la luz puede verse bloqueada en mayor o menor medida.
Como veis y podéis imaginar, las situaciones son variadas y dependen en gran medida de la situación.
¿SOLUCIONES?
Una manera de solucionar este problema, es con los conocidos brazos o las plataformas.
¿En que consisten? Pues los brazos como su propio nombre indica son brazos articulados que nos colocan el flash en diferentes posiciones válidas para disparo vertical como horizontal.
Las placas y regletas las hay de varios tipos, y nos colocan el flash en un lateral de la cámara. En este campo hay una que me parece especialmente atractiva (modelo mini-rc), ya que no es la típica placa recta, y nos separa el flash colocándolo en un lateral y adelantándolo un poco hasta la altura de nuestro objetivo, lo que nos ayuda a evitar un poco las sombras del parasol en los disparos horizontales, y para mayor comodidad, libera espacio en los botones de disparo tanto en posición vertical como horizontal. El modelo mini-rc de la marca custom brackets es usado habitualmente por el fotógrafo Tery Richardson.
Estas son una buena opción para el disparo en vertical, ya que al poner el equipo en esa posición, el flash queda directamente sobre nuestro objetivo iluminando correctamente al sujeto y evitando las molestas sombras laterales. Suelen ser mas económicas y portables que los brazos articulados y mucho menos pesadas y aparatosas, de ahí la ventaja que les doy.
Por último, tenemos los brazos rotatorios, que consisten en un brazo que incorpora un carril semicircular por el cual podemos deslizar la cámara para colocarla en la posición que más nos convenga mientras el flash queda inmóvil en la parte superior.
para usar cualquiera de estos dispositivos, necesitaremos un cable disparador, y es aconsejable que sea compatible con el sistema de ITTL. También podemos optar por usar disparadores inalámbricos, los cuales también deberían ser compatibles con el sistema ITTL de nuestro flash para sacarles el máximo provecho, a pesar de que en un buen número de ocasiones lo usaremos en modo manual.
Ahora pasaremos a ver los tres tipos comentados:
Brazo articulado |
Plataforma |
Brazo rotatorio |
Como se puede comprobar, las posibilidades de cada uno de estos inventos son múltiples, y nos ayudarán a tener nuestras fotografías correctamente iluminadas en cuanto a la posición de la luz se refiere.
Ahora la elección del equipo tenemos que hacerla en base a lo que más se adecue a nuestras necesidades teniendo en cuenta el peso, tamaño, aparatosidad o comodidad.
Para finalizar, dejaré un par de vídeos en los que se explica el uso y montaje de estos dispositivos.
Quiero uno!!
ResponderEliminarLa verdad es que son aparatejos muy útiles, Ruth.
EliminarPor si te interesa, una buena marca, que se dedica a ello es custom brackets, y los puedes encontrar en fotocasión y fotoganga.
pues si que me lo miraré, si!! Gracias!!
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